"Gymir" ganó la Regata Rei en Jaume con el record Salou-Santa Ponça
Gymir (RCN Barcelona), armado por Manuel Codina, se proclamó ganador del XXX edición de la Regata Rei en Jaume en la clase ORC con un tiempo de 18 horas y 10 minutos con el que ha establecido un nuevo récord en la travesía que une los clubes náuticos de Salou y Santa Ponça, recreando la ruta que cubrió el Conquistador para desembarcar en Mallorca.
El Gymir superó el récord de velocidad de la regata que estableció el Raquero con un crono de 19 horas, 42 minutos y 9 segundos en la edición de 2013.
Jaume Morell, a bordo del Mistral Fast (RCN Palma), completó las 110 millas náuticas del recorrido en un tiempo de 25 horas y 15 minutos. Por su parte, el Arosa XII (CN Hospitalet) de Fernando García quedó en tercera posición de la clase ORC en 24 horas y 9 minutos.
En la clase RI, venció el Banff (CN Santa Ponça) de Gabriel Payeras seguido de Vichu (CN Salou) de Jaime Vicheto y la clasificación en el podio la cerró el Nomada IV (CN Santa Ponça) de Vicente Juan Estarellas.
La regata transcurrió en el mar Balear, con salida en la costa catalana y llegada en Mallorca, desde el viernes 9 de septiembre hasta el sábado 10 de septiembre. La salida se dio en Salou con un viento de nordeste que durante el día roló hacia el suroeste.“El viento nos ha acompañado durante toda la travesía. Hemos tenido puntas de hasta 10 nudos aunque el último tramo lo han navegado con un máximo de 4”, explicó el director técnico de la regata, Manuel Nadal.
La regata, que está patrocinada por los Ayuntamiento de Calviá (Mallorca) y Salou (Tarragona) con la colaboración de los puertos deportivos de Port Adriano (Calviá) y Port Tarraco (Tarragona), forma parte del Campeonato de España de Cruceros de Altura, Zona Mediterránea. Su carácter conmemorativo, recrea la ruta de 110 millas náuticas que en 1229 cubrió el Conquistador para desembarcar en Mallorca; el hecho de favorecer el hermanamiento entre las localidades de Calvià y Salou, y la participación de tripulaciones aficionadas y familiares han contribuido a consolidar a la longevidad de una prueba que apuesta por su continuidad.